lunes, 20 de mayo de 2013

Plan de Acción 2013-2015: más de lo mismo, inacción

Como es conocido, el pasado 8 de mayo el Gobierno de Navarra presentó un Plan de Acción 2013-2015, que intenta ser, dicen, un revulviso para la reactivación económica y la creación de empleo. Presentado con la parafernalia habitual, parece algo consistente y audaz. Hurgando con detenimiento vemos que, al menos en cuanto tal Plan no es más que humo, apenas tiene sustancia. Nada nuevo, por otra parte. Constituye una vieja costumbre en UPN. Se cambia la envoltura de lo que se está haciendo, se le pone otro nombre y listo. Un ejemplo clamoroso, pero no el único, fue el Plan Navarra 2012, cocinado al alimón con el PSN. Pero era cocina de aprovechamiento, de restos. Algo parecido pasa ahora. Apenas hay novedades y las que hay han sido en muchos casos reclamadas por el Parlamento o grupos de la oposición sin ningún éxito. Por supuesto, hay que felicitarse por ello, pero, si eran tan sensatas como para formar parte de este plan, no se entiende bien que el Gobierno haya tardado tanto.

domingo, 21 de abril de 2013

Discurso moción de censura

Aunque ya está disponible en otros lugares, reproduzco a continuación el discurso que pronuncié ante el Pleno del Parlamento de Navarra en defensa de la moción de censura que presentamos trece miembros del mismo contra el Gobierno de Yolana Barcina y que se debatió el pasado día 18 de abril. Es largo, pero quizá sea de interés para alguien. He optado por la versión oral para ser más fiel a lo que se dijo en el Parlamento.


miércoles, 27 de marzo de 2013

De relojes, donaciones espontáneas y Hacienda


Ahora que se habla tanto de devoluciones, donaciones y otros gestos altruistas y espontáneos, y con fines puramente especulativos, se me viene a las mientes un suponer con distintos escenarios.

Supongamos que tras años de arduos trabajos en la empresa, y llegado el momento de cesar en mis responsabilidades, aquélla decide, como es por otra parte habitual, regalarme un reloj valorado en, pongamos, 6.000 euros. Una empresa generosa aunque, bien mirado, los servicios prestados hacen que el gesto esté a la altura de mis merecimientos.

martes, 12 de marzo de 2013

Reyno de Estebanillos

Respondió el sagacísimo ciego: –¿Sabes en qué veo que las comiste tres a tres? En que yo comía dos a dos y callabas.

Esa bomba de carga múltiple y efectos retardados que es Caja Navarra, va explosionando a ritmo imprevisible y desembarazado, para escándalo de la ciudadanía y, seguramente, espanto de sus protagonistas. Quizá sea justicia poética, pero la Caja parece vengarse de sus verdugos revestidos de salvadores. Diga lo que diga Goñi, la Caja no existe o, si lo hace, es a modo de zombie que deambula por el lugar del crimen atormentando a quienes la han reducido a ese estado. WalCAN Dead, como decía en afortunada expresión un ingenioso tuitero.

miércoles, 6 de febrero de 2013

La pregunta del millón: ¿Por qué en Donapea?

La presidenta Barcina presentó a finales de diciembre su particular —y peculiar— balance del año que acababa, junto a una batería de propuestas para 2013. Enumeración anodina y poco creíble, destinada quizá a dar apariencia de gobierno o contrarrestar la generalizada sensación de parálisis y desconcierto. Entre las mencionadas propuestas hay una que dice: “Campus público de Formación Profesional y creación de tres centros de investigación médica de la Universidad de Navarra”. La formulación, aparentemente aséptica, no es inocua, sino engañosa y nada casual: la yuxtaposición de ambos proyectos en un mismo epígrafe revela que continúan unidos en el imaginario gubernamental (también en, al menos, el de algún sector del PSN). Y así se pretende trasladar a la sociedad navarra: que ambos proyectos son uno solo, están inextricablemente unidos y cada uno es condición necesaria y suficiente para el otro.

viernes, 18 de enero de 2013

Navarra Building: el culebrón continúa

El asunto de Caja Navarra está adquiriendo una dimensión y una trayectoria que permiten hablar con toda propiedad de un Cangate (pronúnciese Kangueit). No faltan ingredientes: desenvolviéndose entre lo obsceno y lo grotesco, lo que empezó siendo un runrún de personas inquietas o indignadas por lo que intuían podía ser un auténtico expolio social, ha terminado por convertirse en un escándalo de grandes dimensiones que amenaza con llevarse por delante un régimen político, el de UPSN, con su correspondiente concepción sociopolítica de Navarra, y quién sabe si hasta un Gobierno; Gobierno que, en cualquier caso, pagará un elevado coste en forma de descrédito e indignación social que no conoce adscripciones políticas.

domingo, 9 de diciembre de 2012

Crisis, izquierda y rebelión social

“¡Camaradas! —gritaba, y en su demacrado rostro y gestos de desesperación dejábase sentir una verdadera angustia—, los de arriba nos llaman constantemente a hacer nuevos y nuevos sacrificios, pero a los que tienen de todo no los tocan” (John Reed, Diez días que estremecieron al mundo. Txalaparta).

Con el triunfo planetario del pensamiento neoconservador y su plasmación económica, el neoliberalismo, pareció imponerse alguna forma de escatología que llevaba a la proclamación de consumaciones. A la constatación del fin de la Historia siguió la del de las ideologías. Se arrumbó así, no sin desprecio, la vieja distinción entre izquierda y derecha, tachándola de inservible y decimonónica (es frecuente tildar así cuanto no gusta o incomoda). Y había motivos para que la idea calara, más allá de las élites intelectuales. La expansión económica parecía interminable (el ya viejo espejismo del crecimiento continuo) y amplias capas de la población se sentían propietarias, tanto de bienes inmuebles (cautivadas por el fetiche de la vivienda en propiedad) como muebles, en forma no sólo de los tradicionales y anodinos depósitos, sino de acciones, bonos, participaciones en fondos de inversión y toda clase de sofisticados e incomprensibles instrumentos cuya común característica era la promesa de elevados rendimientos y, por tanto, de incrementos continuados de la riqueza personal.