jueves, 20 de enero de 2011

Economía positiva, economía normativa y ruedas de molino

Dice el presidente Zapatero que es mejor reformas sin consenso que ausencia de reformas. Lo dice y quiere aparecer como salvador en una situación extrema. Todo estaría bien si no fuera por dos detalles no menores. El primero, que él es responsable directo de la situación. El segundo, que no se trata de reformar para derribar privilegios o afrontar oscuros intereses creados, sino de empeorar la situación de los más débiles, en nombre de una eficiencia en la que sólo creen algunos incautos que hacen el caldo gordo y sirven de ariete teórico e ideológico a los verdaderos beneficiarios de las reformas. Tampoco esos sindicatos que ahora se niegan al acuerdo son inocentes, seducidos por incentivos no siempre confesables en los plácidos años de la paz social.